La escuela de mañana

A pesar de que los alumnos crecen día a día y realizan sus trabajos escolares con el uso de Internet, en muchos casos la burocracia, los modelos antiguos de enseñanza están determinando formas arcaicas de enseñanza. Esto seguirá así hasta que los alumnos expresen lo que desean de nuestra sociedad, educar también sería ayudar a los alumnos a encontrar su puesto en la sociedad.

En conclusión es importante devolver la pasión por la enseñanza a los docentes, estancados en muchos casos en la pasividad y en métodos tradicionales y las ganas de aprender a los alumnos, con la ilusión de verse realizados el día de mañana en la sociedad en la que vivimos.

VAMOS A SABER MÁS SOBRE MOISES

Un día nació un pequeño que era de israel a su madre le daba mucha pena tirarle al río. Entonces, decidió hacer una cesta de paja para meterlo y dejarlo flotando en el agua. La cesta fue bajando por el río y, al pasar cerca del palacio del Faraón, donde estaba bañándose su hija, le gustó tanto que lo tomó en sus brazos y se lo quedó como si fuera hijo suyo. Le puso por nombre Moisés, que quiere decir «salvado de las aguas». Moisés fue educado en el palacio, como un miembro más de la familia del Faraón. Un día, de mayor, se enteró de que él era israelita. Al ver lo mal que vivía su pueblo, como esclavos, se puso triste y escapó hacia el desierto haciéndose pastor. Cierto día estaba Moisés cuidando el rebaño, cuando vio una zarza ardiendo. Al acercarse, oyó una voz que le decía: «Moisés, Moisés, soy el Dios de tu padre Abraham, de Isaac y de Jacob. He visto lo que sufren los israelitas en Egipto y voy a sacarlos de allí. Vete y dile al Faraón que yo te mando, para que os deje marchar a todos». Pero el Faraón se negó, y Dios le castigó a él y al pueblo egipcio con muchas plagas. Con el último castigo que mandó Dios a los egipcios, murieron muchas personas y por fin, dejó salir de Egipto a los israelitas, que guiados por Moisés, se dirigieron a la Tierra Prometida. Los israelitas se encontraron en su camino con el mar Rojo. Se asustaron mucho porque el ejército egipcio los perseguía muy de cerca. Moisés rezó a Dios, levantó la mano sobre el mar y Dios dividió las aguas del mar Rojo dejando en medio un camino seco. Los israelitas pasaron por allí y, cuando acabaron de pasar, Dios cerró el mar de nuevo y los egipcios fueron derrotados. Dios guió al pueblo de Israel por el desierto y lo llevó hasta el monte Sinaí. Dios llamó a Moisés a la montaña y le dijo: «Yo soy tu Dios, el que os ha sacado de la tierra de Egipto. Vosotros seréis mi pueblo. Cumpliréis mis mandamientos y no tendréis otros dioses». Moisés construyó un arca por mandato de Dios.. En ella guardó las tablas de la Ley. Por fin llegaron a la Tierra Prometida, habían tardado cuarenta años en llegar, Moisés era ya muy viejo y se murió sin entrar en la Tierra Prometida.

HISTORIA DE MOISES